LA FE VIENE POR LA PREDICACIÓN

De la Palabra Encarnada brota una predicación. El predicador sale a llevar el Kerygma. Ese Kerygma primitivo fue el que los apóstoles llenos del Espíritu Santo compartieron con los demás. El centro de la predicación es la resurrección de Jesucristo. Nadie puede dar lo que no tiene. Hay que tener experiencia de Dios para poder transmitir esa fe viva. Sólo escuchando la predicación a través de palabras es que puedes llegar a tener fe