HÁGASE MI VOLUNTAD NO LA TUYA

Nosotros a veces queremos ayudar a Dios y hacer las cosas a nuestra manera, en vez de entregarle nuestros problemas a Dios para que Él sea quien haga la obra. Muchas veces queremos Sus beneficios, pero no estamos dispuestos a seguir sus requerimientos. Busca el reino de Dios y lo demás se te dará por añadidura. Dios siempre va más allá de lo que pedimos o imaginamos. No tengas miedo, ¡sólo ten fe! Escoge el camino de Jesús.